Cómo jugar a la Quiniela: horarios de sorteos en la Nacional, Provincial y provincia de Córdoba

Si hay un juego con publicidad masiva, fama de años y años de existencia que logró llevar riquezas y placeres a miles de argentinos por mucho tiempo, esa es la famosa lotería de la Quiniela. Hablamos de un juego de azar reconocido en todo el país que hace sorteos millonarios de lunes a sábados y que, a cambio de poco dinero, te ofrece la chance de ganar mucho más, si la suerte se encuentra de tu lado.

Millones de personas participan día a día en este juego completamente al azar, buscando fortunas y la chance de hacer importantes cambios en sus vidas: arreglar su hogar o comprar uno nuevo, hacerse con ese auto de sus sueños, hacerle un regalo inolvidable a sus seres queridos, viajar por el mundo y mucho más. Algunos incluso lo juegan hace años, pero la esperanza, como muchos dicen, no es algo que se pierde de manera fácil. Ya sea en los de la mañana, la tarde o los resultados de la nocturna.

La Quiniela, tanto nacional como provincial, se trata de cuatro sorteos diferentes que se producen todos los días excepto el domingo. A diferencia de otros juegos de azar conocidos como el Loto o el Quini 6, es que la Quiniela es un juego bancado. Esto quiere decir, en pocas palabras, que los premios no se acumulan en un pozo, sino que aquellos que deben cobrar ganarán una cantidad que se determina según dos cuestiones: el valor de la apuesta y la cantidad de aciertos en los números con un tope de banca. Este es usualmente cinco veces lo que se recauda en cada juego.

Como indicamos anteriormente, existen muchos sorteos en diferentes horarios de lunes a sábado, cuyos nombres se relacionan directamente con la hora en las que se dan los resultados. Dichos sorteos en cuestión son: la primera mañana, la matutina, la vespertina y la nocturna. Más adelante veremos uno a uno en detalle para comprender y jugar con mayor comodidad, seguridad y certeza. En principio debemos entender cómo se juega a la Quiniela desde un punto de vista general.

Jugar a la Quiniela: nacional, provincial, y cordobesa.

Como base, debemos establecer que la Quiniela se juega apostando una cantidad de dinero que determina el apostador a números que varían entre una y cuatro cifras (es decir, pueden ir desde el 0000 hasta el 9999), y que se reparten en veinte premios diferentes. Dichos números deben ser los que salgan ganadores en el sorteo para que el jugador gane la mayor cantidad de pesos argentinos posible. El apostador también debe especificar dónde se encuentran ubicados los números que elija en el caso de que sean pocos.

Cada bolillero de la Quiniela indica un número ganador. El primero de ellos define el número que representa al millón (que es el que más paga por cada apuesta que se hizo), el segundo la centena, el tercero la decena y el cuarto la unidad. El último bolillero es el que indica la ubicación del extracto (que puede ser desde la posición 1º hasta la número 20).

Diferentes maneras de apostar en la Quiniela

Hay varias maneras de apostar en la Quiniela y todas dependen del gusto personal del jugador. Estas son de dos clases: las apuestas directas, que tiene dos subtipos, y las apuestas redoblonas, que también se dividen en dos.

1. Apuestas directas: se hacen con un número de 1 a 4 cifras en lugar específico dentro del extracto de los 20 premios de siempre. En este caso, se trata de la apuesta directa exacta.

Al mismo tiempo existen las apuestas directas por extensión, las cuales se elige un número como siempre pero la ubicación en el extracto puede variar como el jugador guste.

1. Apuestas redoblonas: se trata de elegir dos números de dos unidades en dos ubicaciones determinadas del extracto. En este caso, como el anterior, se trata de las redoblonas exactas.

Por consiguiente, también existen las apuestas redoblonas por extensión, se hacen también con dos pares de números escogidos posicionándose en cualquier parte del extracto nombrado. Estas son algo más seguras que las anteriores y prometen algunos resultados positivos.

Para hacer las apuestas solo hay que acercarse a alguna sede de Quiniela cerca tuyo, hay muchas alrededor disponibles, por lo que no te costará encontrar una.

Conoce cuánto puedes ganar en la Quiniela

Las matemáticas de la Quiniela son muy sencillas. El valor de las apuestas se multiplica dependiendo a cuántas cifras se apueste y en qué puesto del extracto se ubiquen. Dichas apuestas pueden multiplicarse por siete, por setenta, por seiscientos o por 3500, dependiendo las elecciones tomadas por el apostador.

Por ejemplo, si apostaras a cuatro números y estos salen en la primera posición ganarás tres mil quinientas veces lo que has apostado. ¡Una verdadera hazaña! Si fueran tres cifras ganarías 600 veces lo que apostaste, si fueran dos, serían 70 veces y finalmente si fuera solo uno ganarías 7 veces dicho valor.

Si apostaras dos pesos, por ejemplo, a un número de cuatro cifras, ganarías 7000 pesos; si fuera a uno de tres, ganarías 1200; si fuera uno de dos, te harías con 140; y, finalmente con uno solo dígito, ganarías 14 pesos.

Al final, las opciones son infinitas y tendrás la misma oportunidad que todos de hacerte con un buen monto si la suerte decide estar de tu lado. Ahora, que es también importante, vamos a contarte cuándo ver los resultados que corresponden a la apuesta que hayas hecho. ¡Vamos a verlos!

Al fin y al cabo, todos estamos sujetos a la suerte en todos los aspectos de nuestras vidas. Es cuestión de mantener nuestro espíritu fuerte y confiar en los eventos que pueden traernos fortunas durante el día. Como diferente recurso, podemos apoyarnos en el significado de nuestros sueños gracias a la tabla de la Smorfia Napolitana, desde el 00 (los huevos) hasta el 99 (los hermanos).

Cuándo jugar los diferentes sorteos

Todos los sorteos que nombraremos a continuación son los que se dan de lunes a sábados. Usualmente las probabilidades son las mismas para todos los sorteos y permiten cualquier tipo de apuestas.

¡Que toda la suerte del mundo te acompañe y que las fortunas caigan a tus pies!

La Ley de Atracción: cómo atraer suerte y éxito a nuestras vidas

A lo largo de nuestros años, muchos de nosotros caemos en momentos oscuros, de desesperanza, soledad y temor por el futuro de nuestras vidas. Somos muchos más de los que creemos pero, aún así, incontables veces pensamos que somos los únicos que nos sentimos de esta manera. Esto, más la suma en los casos de trastornos mentales en los más jóvenes, nos pone en una posición en la que sentimos el deber de levantarnos de una vez y tomar lo que merecemos.

En relación a esto, una pregunta que podríamos hacernos es: entonces, ¿cómo puedo dominar mis pensamientos, mis nervios, mis miedos y obtener lo que más deseo? Existe una respuesta que podrá parecer trillada o cliché, pero de seguro debe ser porque no la hemos puesto a prueba lo suficiente: todo está en nuestra mente y en el rumbo que decidamos que ella tome. No hay límites para la mente humana, salvo aquellos que nos pongamos. Para entender esto existe la ley de atraccion.

La Ley de la Atracción se basa en la creencia de que si tenemos un deseo profundo e imparable, el universo (o Dios, o el Cosmos, o cualquier otra clase de ser omnipotente) nos la dará. La pobreza o la riqueza, el amor o la soledad, la paz o la agonía dependen exclusivamente de la manera en la que enfrentamos al mundo con nuestra mente. Después de todo, nada puede lograrse sin un deseo que brille e ilumine el mundo que nos rodea.

Cualquier sueño, idea, pensamiento o plan que tengamos en nuestra mente de forma constante e ininterrumpida promete ser algo que se cumplirá algún día. Los pensamientos son otra forma de tantas de la energía, que puede ser positiva o negativa. Es por esta razón que nuestro futuro recae únicamente en nuestras manos. Recordemos que “el universo conspira a nuestro favor”, como indican los sabios hindúes.

El universo requiere algo más que nuestro pensamiento

Pero solamente desear y pensar no son suficientes. Para que el universo nos provea con lo que necesitamos debemos ofrecerle al universo algo a cambio. ¡No nos asustemos! No requiere tanto. Solo que seamos amables, considerados y positivos con los demás. Por ejemplo, diciendo por favor y gracias, permitiendo a alguien que se adelante en la fila para las compras o prestando dinero a alguien en una situación desesperada. Hay miles de maneras de encontrar balance entre lo que deseamos y lo que debemos aportar.

Debemos ser portadores de buenas noticias, un apoyo para aquellos desahuciados, una compañía para quienes lo necesiten. Impartiendo actitudes positivas, útiles y resolutivas encontraremos a futuro resultados extraordinarios. Quienes nos observan se alimentan de nuestro positivismo y buena predisposición. Ayudar a la transformación positiva de otros no hará más que acrecentar nuestras posibilidades de encontrar éxito en todos los sentidos de la vida en el futuro.

Cada ser humano guarda un poder inconmensurable. Somos seres que podemos transformar el mundo para bien o para mal, somos una influencia constante en otros, tanto en los desconocidos, como en nuestros amigos y quienes quieren hacernos mal. Por esa razón somos nosotros los que debemos pisar fuerte en la tierra y dar lo mejor que tenemos para dar.

Logremos que el Cosmos conspire a nuestro favor, si queres ganar la quiniela pedilo por favor

El mismo Jesús de Nazareth dijo una vez: “pedid y se les dará; buscad y encontrarán; tocad la puerta y se les abrirá. Porque todo el que pide, recibe; el que busca, halla; y al que llama, se le abre”. Creas o no, en la religión fundada por Jesús, nadie discute que fue probablemente uno de los hombres más sabios que alguna vez pisó esta tierra.

Si vamos a pedir por algo, lo mejor es pedir las cosas por favor, entregándonos al universo y soñando con esperanza que alcanzaremos la meta que sea que queremos. Nuestras creencias y valores son los que determinarán nuestras ganancias dentro de nuestros próximos días. Hablamos sobre todos los aspectos de la vida: tanto sobre nuestras riquezas como el amor, nuestra carrera como nuestra desenvoltura en una profesión.

Recordemos que nuestra actitud frente a la vida lo es todo. No sirven la desesperanza ni las malas sensaciones. Una vez que demos rienda suelta a la mente y las buenas vibras encontraremos todo lo que necesitamos y deseamos. ¡Sé positivo, sé constante y entrégate a aquello más grande que tú!